La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha indicado que, en las condiciones de competencia existentes el mercado español, las marcas de las distribución (más conocidas como marcas blancas) no suponen una discriminación para la marca del fabricante, sino que es "positiva para la competencia y para los consumidores".
Así lo reconoce la resolución de la CNC del 15 de junio de 2010 sobre las marcas del distribuidor en leche líquida, a la que ha tenido acceso Europa Press.
Para el órgano que preside Luis Berenguer, la existencia de marcas blancas en los puntos de venta no suponen la discriminación de las marcas de los fabricantes ni su expulsión de los lineales, al tiempo que recoge el análisis realizado por la Unión Europea en octubre de 2009, en el que califica a la marca del distribuidor como "expresión de una competencia dinámica".