El Parlamento serbio apoyó hoy la determinación del Gobierno de rechazar la autoproclamada independencia de Kosovo y pedir el apoyo internacional para seguir negociando una salida diplomática al conflicto.
Tras un intenso debate de casi doce horas, 192 diputados votaron en favor de la propuesta de estrategia del Gobierno y 26 se pronunciaron en contra.
Este resultado supone un espaldarazo a los planes del Gobierno de Belgrado, que el pasado viernes recibieron un varapalo después de que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) considerara que la proclamación de independencia en 2008 no vulneró la legislación internacional.