Los inventarios de crudo de Estados Unidos repuntaron de forma inesperada en la semana que concluyó el pasado 16 de julio. En concreto, subieron en 400.000 barriles, mientras que los analistas consultados por Platts esperaban una caída en 1,6 millones de barriles.
Las reservas totales se sitúan e 353,5 millones de barriles de crudo, segúnha informado hoy la Agencia de Información Energética, dependiente del Departamento de Energía.
Por su parte, los inventarios de gasolina crecieron en 1,1 millones de barriles, mientras que los de destilados repuntaron en 3,9 millones. Ambas lecturas están también por encima delo previsto.