La Seda de Barcelona ha anunciado hoy que espera cerrar el año con un resultado bruto de explotación (EBITDA) de entre 61 y 66 millones de euros tras la vuelta a la normalidad en la producción de sus instalaciones principales de El Prat. Hace un mes, su presidente, José Luis Morlanes, había dicho que el EBITDA alcanzaría los 50-65 millones de euros en 2010, después de haber logrado 18 millones de euros hasta mayo y tras las pérdidas de 47 millones de 2009.
En una presentación a analistas con motivo de la ampliación de capital de 300 millones de euros que La Seda quiere lanzar próximamente y de cuyo éxito depende la viabilidad del grupo químico, La Seda recordó que prevé una cifra de ventas este año de unos 1.000 millones de euros, frente a los 863 millones en 2009.
La Seda señala que la mayor generación de caja gracias a una mejor rentabilidad y gestión del circulante redundarán en una reducción de la deuda financiera "hasta alcanzar ratios deuda neta/EBITDA menores de 1 antes de 2015.