A ambos lados del Atlántico, los precios del petróleo bajaron esta semana hasta sus niveles más bajos desde comienzos de junio, empujados por los malos datos macroeconómicos, sobre todo en Estados Unidos y China.
El Petróleo Intermedio de Texas (WTI), la referencia en EEUU, fue perdiendo valor a lo largo de semana al conocerse indicadores económicos y de desempleo, considerados por los analistas como "desfavorables" y que suscitan inquietud en torno a un posible descenso en la demanda petrolera.
Tras abrir la semana a más de 78,25 dólares por barril, el crudo de referencia para Estados Unidos cerró la semana a 72,14 dólares, un 8,5 por ciento menos que el lunes pasado.