Un sexto soldado de las fuerzas internacionales ha muerto este fin de semana al estallar una bomba casera en el sur de Afganistán, según ha anunciado hoy domingo la comandancia de la OTAN, haciendo llegar a 91 el número de militares muertos desde comienzos de año.
El soldado, cuya nacionalidad no fue dada a conocer, murió al estallar una mina casera, arma preferida de los insurgentes.
Anteriormente, la comandancia de la OTAN había anunciado la muerte de cinco soldados de las fuerzas internacionales en explosiones de bombas caseras en el sur y el este de Afganistán. En Varsovia, el ejército polaco había anunciado la muerte de un artificiero en la provincia de Ghazni, al este de Afganistán.