Julia Gillard se convirtió hoy en la primera mujer en asumir la jefatura del Gobierno de Australia, tras la renuncia al cargo de Kevin Rudd a raíz de una repentina revuelta surgida por desacuerdos en el seno del Partido Laborista.
Gillard, investida primera ministra por la Gobernadora General de Australia, Quentin Bryce, anunció que convocará elecciones en los próximos meses y se comprometió dar un golpe de timón para corregir la política de Rudd, cuya popularidad atravesaba por el peor momento desde que ganó de forma holgada los comicios de 2007.
"El gobierno estaba perdiendo el rumbo", destacó la primera ministra y nueva líder del Partido Laborista.