Afganistán puede convertirse en un gran centro minero mundial, pero la corrupción o la escasa industrialización representan grandes problemas.
Afganistán posee yacimientos minerales sin explotar cuyo valor de mercado podría alcanzar el billón de dólares (más de 820.000 millones de euros, una cantidad equivalente al PIB de Países Bajos), según estimaciones de altos dirigentes del Gobierno de Estados Unidos, que opinan que el desarrollo de la industria minera podría cambiar por completo la situación económica (y la guerra) en el país centroasiático, donde a día de hoy uno de los negocios más relevantes es el de la exportación ilegal de opio.
Según destacados dirigentes estadounidenses citados por el diario 'The New York Times', Afganistán tiene potencial para convertirse en el principal centro minero del mundo por sus enormes yacimientos de tales como hierro, cobre y cobalto.