Los líderes de la UE buscarán limar sus diferencias sobre la creación de una tasa a la banca que garantice que las entidades contribuyen a financiar los costes ocasionados por futuras crisis financieras, en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en Bruselas el próximo jueves.
El último borrador de conclusiones refleja el consenso de los dirigentes para imponer un impuesto a las instituciones financieras y la necesidad de defender una postura europea consensuada a este respecto en la próxima reunión de líderes del G-20, que se celebrará en Toronto los próximos 26 y 27 de junio.
Sin embargo, las distintas fuentes consultadas aseguran que "la idea no suscita unanimidad" y podría ser objeto de una formulación distinta en el documento que finalmente sea respaldado por los líderes europeos, la semana que viene.