Tal y como anunció en diciembre del pasado año, el Banco de Canadá ha mantenido los tipos de interés estables hasta mediados de 2010. Una vez cumplido el plazo, la institución financiera ha optado por elevar la tasa interbancaria un cuarto de punto, del 0,25% anterior hasta el 0,5% actual.
Se trata del primer país miembro del G-8 que toma una decisión en esta dirección desde que comenzó la crisis, aunque no ha sorprendido al mercado después de registrar un crecimiento del PIB del 6,1% en el primer trimestre.
Según indica en su comunicado, el impacto de la crisis de deuda en Europa sobre Canadá "se ha limitado a una modesta caída en los precios de las materias primas y en cierta presión sobre las condiciones financieras".