El púgil filipino reavivió este sábado las esperanzas de un combate contra el estadounidense Floyd Mayweather, previsto inicialmente el pasado 13 de marzo, aunque se anuló debido a un desacuerdo en las pruebas antidopaje, a las que el filipino finalmente ha accedido a someterse.
"He aceptado pero no deben extraer demasiada sangre", declaró Pacquiao a una cadena de televsión de su país. "Deben tomar lo que sea necesario", añadió el boxeador.
La historia de la lucha entre Pacquiao, de 30 años, y ganador de siete títulos mundiales en siete categorías, y Mayweather, de 33 años, y seis veces campeón del mundo en cinco categorías, se prolonga desde hace varios meses.