La empresa Portumetal de Portugalete (Vizcaya) ha solicitado concurso de acreedores y adeuda una media de unos 9.000 euros a cada uno de sus 60 trabajadores desde hace aproximadamente un año.
Según informó CCOO en un comunicado, la central "sospecha que la dirección de la empresa ha dejado morir a la compañía al negarse a hacer inversiones" porque, entre otras cuestiones, "el terreno que ocupa la fábrica, junto al Centro Comercial Ballonti y en un entorno edificable, podría ser objeto de especulación".
Portumetal, que se dedica a fabricar casquillos de latón para varias multinacionales, entre ellas el fabricante de maquinaria para construcción Caterpillar, ha sufrido durante el último año dos Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) en modalidad de suspensión, que han sido aprobados sin complementos económicos, es decir, "con una elevada dosis de sacrificio para la plantilla".