El cobre, el níquel y el plomo han sido las materias primas que mejor se han comportado en los cuatro primeros meses del año, pero en Wall Street cada vez se extiende más la opinión de que los crecientes suministros están superando la demanda. "Esta es una burbuja real", comenta a Bloomberg el operador de metales David Threlked. Los economistas que esperan un descenso de los precios están convencidos de que el consumo podría caer en parte porque China podría reducir su voracidad por las subidas de los tipos de interés. La demanda también está debilitándose por una desaceleración de la economía estadounidense y una búsqueda de alternativas al cobre y el níquel, históricamente caros, por parte de los consumidores. El cobre bajará un 30% en el cuarto trimestre del ejercicio, según las estimaciones de 12 analistas recogidas por Bloomberg. El níquel y el plomo bajarán alrededor del 50% desde los precios récord alcanzados el 4 de mayo.
