El presidente de México, Felipe Calderón, aseguró hoy que más del 90% de las muertes atribuidas al crimen organizado en el país corresponden a sicarios, un 5% a policías y militares y menos de un 5% a población civil.
Según un informe oficial filtrado esta semana, en México fueron asesinadas desde diciembre de 2006 a principios de abril de 2010 22.743 personas como consecuencia de la guerra que se libra entre los cárteles de las drogas y entre éstos y las fuerzas del orden.
En las últimas semanas la sociedad mexicana e internacional ha sido sacudida por la muerte de jóvenes o niños inocentes caídos en medio de enfrentamientos o atacados directamente por sicarios.