La operadora italiana registró en 2009 un beneficio neto de 1.580 millones de euros, lo que supone un descenso del 27% con respecto al aejercicio anterior. Los ingresos cayeron un 6,3% hasta 27.160 millones de euros, desde los 29.000 millones de euros que facturó en 2008.
Para este año, Telecom Italia prevé que ingresar entre un 2% y un 3% menos, mientras que estima un crecimiento anual medio del 1% para de 2010 a 1012, por debajo del 2% que había calculado inicialmente.
La compañía señaló que ha provisionado 507 millones de euros para hacer frente a la investigación por fraude de su filial Sparkle, que en 2009 ganó unos 10 millones de euros. La compañía había aplazado la presentación de sus resultados por esta investigación.