El Fondo Monetario Internacional (FMI) podría aportar 15.000 millones de euros adicionales al plan de salvamento de Grecia (un tercio del total) que se sumarán a los préstamos bilaterales de 30.000 millones (dos tercios) que acordaron ayer los países de la eurozona para rescatar a Grecia de su crisis de endeudamiento.
El Ejecutivo comunitario admitió que habrá "ligeras diferencias" entre el tipo de interés que cobrarán los países de la eurozona, alrededor del 5%, y el que impone habitualmente el FMI, que es inferior.
"Se trata de un mecanismo dual de la UE y del FMI pero con un marco único y se activará como un marco único", explicó el portavoz de Asuntos Económicos de la Comisión, Amadeu Altafaj. Ello significa que si Grecia pide una determinada cantidad no elegirá si el dinero viene del FMI o de la eurozona sino que automáticamente dos tercios de la ayuda vendrán de los Estados miembros de la eurozona, con su tipo de interés correspondiente, y un tercio del Fondo.