La crisis económica amenaza a Ellis Island, la pequeña isla junto a la Estatua de la Libertad de Nueva York que sirvió durante décadas de puerta de entrada a Estados Unidos para millones de inmigrantes y que ahora ve cómo la asociación que se encarga de su conservación podría quebrar.
Save Ellis Island, la organización sin ánimo de lucro que desde hace diez años ha recaudado fondos para rehabilitar partes de la isla y se ha encargado de su mantenimiento, anuncia en su página web que dispone de pocas semanas para recaudar el medio millón de dólares necesario para continuar con su tarea y no desaparecer.
"Pedimos que nos haga una donación lo más generosa posible", dicen los responsables de la organización en un anuncio que hoy se puede ver en su portal de internet y en el que reconocen la "grave situación" que atraviesan sus finanzas, unas cuentas afectadas por "el catastrófico efecto de la crisis económica".