El PSOE recabó hoy el apoyo de CiU para sacar adelante la enmienda para la supresión de los blindajes en empresas, que limitará sus efectos a las sociedades cotizadas y se empezará a aplicar un año después de que entre en vigor la reforma de las leyes de Auditoría, Mercado de Valores y Sociedades Anónimas.
El grupo parlamentario socialista, que en principio pretendía que las limitaciones en los derechos de voto de los accionistas se suprimieran en enero de 2011, ha aceptado así las variaciones introducidas por CiU en la enmienda, muy criticada por la mayoría de los grupos de la oposición.
En virtud de la enmienda, "serán nulas de pleno derecho las cláusulas estatutarias que, directa o indirectamente, establezcan dicha limitación".
No obstante, las empresas que actualmente cuentan con este tipo de blindajes, como Iberdrola o Repsol, contarán con "un año desde la publicación de esta Ley en el BOE" para adaptarse a la nueva normativa.