Investigadores japoneses de la Universidad de Osaka presentaron el sábado un robot humanoide que puede reírse y sonreír, además de imitar las expresiones faciales de una persona, una criatura que pondrán a prueba en un hospital para que haga compañía a los enfermos.
El profesor Hiroshi Ishiguro, que ya imaginó una familia de robots con rostro humano, entre ellos uno que es casi su clon, está satisfecho con la naturalidad de su nueva mujer artificial.
"Una nueva tecnología suscita siempre temores y opiniones negativas", dijo. Añadió que su equipo quería hacer robots con capacidad para expresar emociones. Durante una demostración, el androide de larga cabellera castaña y vestido con una falda negra, sonrió y frunció el ceño en señal de enfado imitando casi de forma simultánea a una veinteañera que le sirvió de modelo.