General Motors (GM) decidió retirar 5.000 furgonetas nuevas en Estados Unidos y suspendió la producción y venta de esos modelos hasta nueva orden, informó este sábado el fabricante de automóviles estadounidense en un comunicado.
Le medida atañe a los modelos GMC Savana y Chevrolet Express salidos de fábrica en febrero y marzo y está vinculada a una supuesta falla en el alternador de los vehículos, indicó GM.
"Se decidió detener la producción y venta" de esos modelos "para garantizar la protección de los consumidores hasta que hayamos encontrado un procedimiento para repararlos", añadió el comunicado.