La crisis económica ha hecho mella en el volumen de operaciones comerciales de las zonas tradicionalmente más demandadas de Barcelona, provocando una caída de entre un 15% y un 25% de los precios de los locales en 2009 con respecto a 2008, en parte de las principales calles comerciales de la ciudad.
Según un estudio de la compañía inmobiliaria BNP Paribas Real State -división del grupo bancario- que ha sondeado 1.226 locales de la zona del centro de la ciudad, los precios de alquiler se han hundido casi un 25% de media en algunos puntos de la Avenida Diagonal, entorno a un 15% en Rambla Cataluña, y más de un 16% en los tramos estudiados de las calles Valencia, Mallorca y Rosellón.
Este hecho va ligado al retroceso de un 26% de las transacciones de locales comerciales durante este año pasado, lo que ha dado fuerza de negociación a los arrendatarios para mejorar las condiciones de sus contratos, frente a los anteriormente todopoderosos propietarios.