Las mujeres de Túnez y Argelia han encontrado en la explotación del esparto una fuente de empleo sostenible para la región, que además las ayuda a incorporarse al sistema económico global, a lo que ha contribuido un proyecto de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
El esparto, entre otras aplicaciones, es uno de los componentes utilizados para hacer la pasta con la que se fabrica el papel para los billetes de euro, pero en estas regiones se ha reservado tradicionalmente para hacer fuego.
Además, las extensas praderas del norte de África en las que crece sirven para evitar la desertización.