Las autoridades de Texas ejecutaron el martes a un hombre declarado culpable de haber matado al ingeniero brasileño Kleber Santos en el 2000 y que se presume violó y mató a la esposa de éste.
En agosto del 2000, el convicto Michael Sigala estaba en libertad condicional tras haber cometido un robo y tenía permiso para salir de un centro de tratamiento de adicciones en la zona de Dallas para buscar empleo durante el día.
Sin embargo, la policía dice que mató a los recién casados en su departamento en la localidad de Plano y terminó condenado a muerte.