La última ronda de negociaciones entre Islandia, Países Bajos y Reino Unido para que la isla indemnice a los ahorradores de los dos países que perdieron sus inversiones por la quiebra del banco islandés Icesave, llegó ayer a su final sin que se alcanzara ningún acuerdo.
Esto deposita en los ciudadanos islandeses la responsabilidad de la decisión final sobre el asunto mediante el referéndum que se celebrará el próximo 6 de marzo.
El Ministerio de Finanzas de Islandia confirmó a través de un comunicado que las negociaciones mantenidas en Londres en las dos últimas semanas entre representantes de los gobiernos de los tres países llegaron a término "sin una resolución final".
