El primer ministro chino, Wen Jiabao, volará esta semana a Japón en la que será la primera visita en al menos siete años de un primer ministro chino, como prueba de que se han retomado las relaciones diplomáticas después de que estuvieran prácticamente rotas a causa de las diferencias respecto al papel de Japón durante la segunda guerra mundial. Así pues, este viaje supone una vuelta de tuerca en los lazos entre ambos países y cuyo primer paso fue dado por el primer ministro japonés, Shinzo Abe, viajó a Beijing el pasado septiembre para romper el hielo. Wen reconoció que las relaciones entre China y Japón se encuentran en un "punto crítico" y que ambas naciones "deberán hacer un esfuerzo para impulsar los lazos de unión". Temas relacionados con la cooperación militar, el diálogo económico y la colaboración para la conservación de la energía, así como la protección medioambiental y las finanzas ocuparán un apartado en la agenda.
