El presidente de Spanair, Ferrán Soriano, ha explicado que la nueva situación financiera de la empresa, con la que prevé unas pérdidas de 120 millones de euros en 2009 y de 30 millones en 2010, pero confía en obtener un beneficio operativo de entre 5 y 10 millones en 2011 y de unos 30 millones en 2012.
Esto se debe a los recientes acuerdos para asegurar la ampliación de capital con nuevos inversores y la suscripción de un crédito sindicado con la banca con garantías del Institut Català de Finances (ICF).
Soriano afirmó en rueda de prensa que se da por finalizada la primera fase de la nueva Spanair. Han sido diez meses de "caos creativo" y "mucho esfuerzo y sacrificio", con el traslado de trabajadores de Palma de Mallorca a Barcelona, y recortes de empleo y sueldo, también entre los colectivos de pilotos y tripulantes de cabina. Esta semana esperan cerrar otro acuerdo con los mecánicos y sobre la mesa está una reducción de personal del 10% con bajas voluntarias, disminución salarial y la entrada al capital de la compañía.