Un huracán arrollador de R&B, soul y pop inundó esta noche el Teatro Real de Madrid, donde la cantante Alicia Keys ofreció un concierto para 1.700 afortunados que pudieron disfrutar en directo con las canciones del nuevo álbum de la artista estadounidense, "The element of freedom".
Apenas cincuenta minutos de actuación y tan sólo diez canciones, más que suficiente cuando se trata de la portentosa voz de Alicia Keys, que hizo estallar de júbilo a un auditorio que acompañó todas y cada una de las canciones propuestas por la artista nacida en Nueva York.
Pero no todo fueron sonrisas y diversión, ya que un par de centenares de personas se quedaron sin entrada y sus protestas, en la puerta del teatro, llegaron a tal extremo que la Policía Municipal tuvo que intervenir para evitar males mayores.