Las ventas de la división europea del consorcio automovilístico General Motors, General Motors Europe, podrían reducirse un máximo de un 5% durante el presente ejercicio, según anunció hoy el presidente de la compañía, Nick Reilly, en el Salón Internacional del Automóvil de Detroit.
Al mismo tiempo, Reilly indicó que esta reducción máxima de un 5% representa un síntoma de recuperación, dado que ha finalizado prácticamente la totalidad de los programas de incentivo directo a la compra de automóviles en diferentes países del continente europeo.
El máximo responsable de la filial europea de General Motors comunicó que durante el pasado año se vendieron 1,2 millones de unidades de vehículos de Opel y Vauxhall y señaló que la compañía lo tendrá "difícil" para mantener este volumen durante 2010.