El ministro chino de Sanidad, Chen Zhu, alertó este domingo en un comunicado que la epidemia de gripe A se está extendiendo rápidamente por extensas zonas rurales del país, y que podría darse un nuevo repunte de casos durante el Año Nuevo Lunar, el próximo febrero, fecha en la que millones de chinos vuelven a sus ciudades y pueblos natales a visitar a sus familias.
"Los brotes de gripe A en Pekín, Shanghai y otras grandes ciudades, así como los ocurridos en escuelas, se han reducido mucho. Sin embargo, la extensión del virus continúa en pueblos y comunidades rurales", afirma Zhu en el comunicado. "El riesgo de contraer el virus de la gripe A se incrementará (...). Se espera que en próximas fechas el virus se expandirá intensamente", añade.
El Gobierno chino es consciente de que aún no se ha vacunado a un porcentaje de su población suficiente, y que la expansión del virus será difícil de controlar una vez que alcance las zonas rurales pobres y subdesarrolladas durante el invierno. Es precisamente en estas regiones donde vive la mayoría de los 1.300 millones de chinos.