No acudieron a lo que fue una cena de estado, y ciertamente no se colaron a propósito.
Sin embargo, una pareja de turistas estadounidenses que se presentó en la Casa Blanca un día antes de una planeada visita terminaron de alguna forma en un desayuno de rigurosa invitación que era ofrecido por el presidente Barack Obama y la primera dama, Michelle Obama. Y nuevamente la Casa Blanca tuvo que explicar cómo personas que no estaban en la lista de invitados terminaron ingresando a la mansión presidencial de todas formas.
La inesperada aventura de Harvey y Paula Darden, partidarios de Obama y radicados en la ciudad de Hogansville en el estado de Georgia, ocurrió el Día de los Veteranos de Guerra, dos semanas antes de que una pareja en busca de celebridad, Tareq y Michaele Salahi, entró sin invitación a una cena oficial de los Obama para el primer ministro de la India, Manmohan Singh.
Los Darden se presentaron un día antes para una visita que había sido programada a través de su representante legislativo. La Casa Blanca y el Servicio Secreto dijeron que los Darden pasaron por las revisiones de seguridad necesarias y se les permitió asistir al desayuno como cortesía porque no había visitas públicas ese día.