La región separatista georgiana de Abjazia celebra hoy elecciones presidenciales con el único apoyo de Rusia, Venezuela y Nicaragua, los únicos tres gobiernos que reconocen su existencia como república independiente disociada de Georgia, con cierto temor ante la posibilidad de que Moscú, su principal valedor, termine haciéndose con las riendas de la región a través de su enorme influencia económica.
A estos comicios acude como principal favorito el actual presidente, Sergei Bagapsh, cuya figura se ha visto fortalecida tras el conflicto del año pasado entre Rusia y Georgia tras el conflicto del año pasado por la también región separatista georgiana de Osetia del Sur. Durante la guerra, Bagapsh aprovechó para ratificar la independencia abjacia respecto de la ex república soviética.
Georgia ha tachado de "charada" las elecciones en Abjazia y ya ha adelantado que no reconocerá al ganador de los comicios, que no obstante tienen todas las papeletas para decidirse en una segunda vuelta, entre Bagapsh y quien quiera que consiga el segundo mayor número de votos.