Los inventarios de petróleo de Estados Unidos subieron en 1,3 millón de barriles la semana finalizada el pasado 16 de octubre hasta una cifra total de 339,1 millones de barriles, según los datos publicados hoy por la Administración de Información Energética (EIA, por sus siglas en inglés) perteneciente al Departamento de Energía estadounidense. El aumento es mayor de lo que esperaban los analistas.
Los analistas consultados por la consultora energética Platts habían pronosticado un aumento de las reservas de 2,2 millones de barriles.
Los inventarios de gasolina, por su parte, descendieron en 2,3 millones de barriles, mientras que los de los productos destilados bajaron en 800.000 barriles.