La disposición del presidente Barack Obama a contemplar alternativas a las demandas judiciales por mala praxis médica está abriendo la posibilidad de sacar esos casos de los tribunales, para permitir que sean expertos y no jurados quienes decidan si las denuncias tienen sustento.
La idea de nombrar a expertos neutrales para analizar los hechos consignados de presunta mala praxis atrae a grupos conservadores en ambos partidos. Esos grupos quieren abordar las responsabilidades de los médicos como parte de la legislación de salud, que hasta ahora no ha hecho gran mención del asunto. Pero los abogados litigantes se oponen firmemente a esos límites.
Sin embargo, la Asociación Estadounidense de Hospitales ha ofrecido un nuevo plan a los legisladores, con la esperanza de que se tome en cuenta durante el debate en el pleno senatorial sobre la reforma de salud, en las próximas semanas.