El jefe de la policía iraní declaró el domingo que los manifestantes que murieron en la cárcel de Kahrizak, cerrada en julio pasado, fallecieron debido a un virus y no por haber sido golpeados por la policía, indicó la agencia semioficial ILNA.
Las autoridades iraníes abrieron una investigación tras la muerte en prisión de varias personas detenidas durante las manifestaciones contra la reelección del presidente Mahmud Ahmadinejad.
"Los detenidos en ese centro (penitenciario) no murieron porque fueron golpeados por la policía sino a causa de una enfermedad viral", declaró el jefe de policía, Esmail Ahmadi Moghaddam.