El fabricante de ordenadores chino registró en su primer trimestre fiscal unas pérdidas de 16 millones de dólares, frente al beneficio de 110,5 millones de dólares que obtuvo en el mismo periodo del año anterior.
Se trata del tercer trimestre consecutivo en el que Lenovo registra números rojos, aunque son menores de lo esperado por los analistas consultados por Reuters, que habían previsto pérdidas de 54 millones de dólares.
En cuanto a las ventas, estas se redujeron un 18% hasta 3.460 millones de dólares. Según informó la compañía, la perspectiva para el mercado de ordenadores personales muestra una "pequeña mejora".