BBVA observa "signos claros de estabilización", aunque no de recuperación "sostenida", en el panorama macroeconómico español, hasta el punto de que prevé que la economía española se contraiga en el segundo trimestre un 0,8% en tasa intertrimestral, la mitad de lo que lo hizo en los primeros tres meses del año (-1,9%), y dos décimas menos de lo que estimaba en abril.
Para el conjunto de 2009, el Servicio de Estudios de BBVA mantiene sin cambios sus estimaciones anteriores, realizadas en abril, y prevé que el PIB retroceda un 3,5%.
Para 2010, sin embargo, espera un ligero empeoramiento, desde una contracción estimada inicialmente en el -0,3% a una caída del -0,7%, que se debe al efecto arrastre que podría tener sobre la economía la finalización del impacto de algunas medidas tomadas por el Ejecutivo que se esperaba que tuvieran un efecto menos inmediato del que han tenido.