El grupo constructor FCC va a entrar en el mercado ruso con la adjudicación, a través de su filial austríaca Alpine, del proyecto de construcción de una autopista entre Moscú y Minsk con un presupuesto de 550 millones de euros.
Fuentes de Alpine en Viena confirmaron que la empresa se ha adjudicado la obra aunque precisaron que el contrato aún no ha sido formalizado de forma definitiva.
El proyecto, que no comenzará a ejecutarse antes de 2010, consta de la construcción de un tramo de la autopista M1 de cerca de 20 kilómetros que unirá la capital rusa con la bielorrusa.