El Tribunal Constitucional de Portugal dictaminó hoy que el matrimonio entre personas del mismo sexo es anticonstitucional, al rechazar el recurso presentado por dos mujeres contra la decisión de un tribunal de Lisboa que les había negado el derecho a casarse en 2006.
A dos meses de las elecciones generales en el país luso, previstas para el 27 de septiembre, la decisión del Tribunal Constitucional irrumpirá en la campaña. La legalización de las uniones homosexuales es uno de los puntos del programa del gobernante Partido Socialista, que fue presentado el pasado miércoles.
Las afectadas, Teresa Pires y Helena Paixao, todavía pueden presentar un recurso interno al dictamen del Constitucional, y tienen planes de recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, según informa la prensa local. Ellas apelan a la supuesta inconstitucionalidad del término "sexo opuesto" incluido en la definición de matrimonio que figura en el Código Civil, ya que la Carta Magna prohíbe explícitamente la discriminación basada en la orientación sexual.