Urende, la cadena española especializada en distribución de electrodomésticos, electrónica de consumo, informática y nuevas tecnologías, perteneciente al Grupo Sánchez-Ramade, ha realizado una ampliación de capital de 60 millones de euros, suscritos en su totalidad por la familia Sánchez-Ramade propietaria del grupo.
Según indicó Urende en una nota, la operación fue aprobada esta semana por los órganos de gobierno de la empresa y representa un "importante salto cualitativo en el fortalecimiento de la estructura financiera de la compañía".
Para su presidente, Javier Sánchez-Ramade, la ampliación, además de su repercusión positiva en el balance, "tiene un significado especial, ya que confirma nuestra confianza en el futuro, puesto que, en un contexto económico y empresarial difícil que afecta de lleno al sector de la distribución y el consumo, nosotros contamos con un proyecto fuerte, solvente y con clara vocación de continuidad".