El presidente del grupo Bernard Krief Consulting, Louis Petiet, anunció hoy su intención de comprar la firma de alta costura Christian Lacroix, que suspendió pagos el pasado mayo. La célebre casa de costura, de brillante destino artístico pero pésimos resultados económicos, deberá cerrar sus puertas a finales de julio en caso de no encontrar un nuevo propietario. El grupo BKC es conocido por su experiencia en la compra de empresas en dificultad.
En declaraciones a la emisora France Info, Petiet subrayó el valor de esta firma de alta costura que es, dijo, "una gran marca de referencia mundial" y un valioso "patrimonio nacional" francés, cuya proyección internacional aseguró piensa impulsar. Sin comprometerse a conservar los 125 asalariados de la casa de costura, Petiet aseguró que intentarían "mantener una situación lo más similar posible a la actual".
BKC no es el único potencial comprador de Lacroix, pero según informó hoy el administrador judicial nombrado por el Tribunal de Comercio de París para gestionar la firma, de momento nadie presentó una oferta real. El plazo para hacerlo concluye el próximo día 27.