Cientos de personas podrían estar afectados por el que se sospecha que es el mayor fraude ponzi (modelo de estafa utilizada por Bernard Madoff) de la historia reciente de Reino Unido. Y es que alrededor de 600 inversores, incluyendo deportistas, conocidos hombres de negocios y otras celebridades invirtieron en conjunto unos 80 millones de libras (cerca de 93 millones de euros) en la conocida firma Business Consulting International (BCI).
BCI está siendo investigada por el regulador británico y la policía de Londres, sospechosa de estafar a sus ricos clientes, a los que prometía rentabilidades mensuales de entre el 6 y el 13%. Según la firma, estas extraordinarias ganancias las conseguía prestando dinero a compañías en apuros, que supuestamente le reportaban unos abultados tipos de interés. En realidad, utilizaban las aportaciones de nuevos clientes para pagar a los antiguos.
Este fraude podría llevar en marcha desde 2007, según la web financiera Citywire, pero comenzó a fallar y por tanto a levantar sospechas a finales de 2008. Finalmente, el pasado mayo tres consultores financieros de BCI fueron detenidos como sospechosos de conspiración para defraudar, lavado de dinero y estafa. De momento, la policía les ha incautado activos por aproximadamente 1 millón de libras, incluyendo ocho coches de lujo, entre ellos un Lamborghini, dos Ferraris y varios Bentley.