El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer una partida de emergencia de 1.825 millones de dólares (unos 1.270 millones de euros) para combatir la nueva pandemia de gripe A (H1N1) mediante la compra de fármacos para las vacunas.
El dinero irá destinado también para las campañas de inmunización de personal sanitario al tiempo que buscan conseguir que las vacunas a estas infecciones sean aprobadas por la Administración de Medicamentos y Alimentos estadounidense, según reveló el inquilino de la Casa Blanca en una carta a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
"Para mejorar la capacidad de nuestra nación de responder a la propagación potencial de este brote, y de acuerdo con la asignación, destino por tanto 1.825 millones de dólares", sostiene Obama en la misiva donde añade que en la partida se incluyen "fondos de emergencia requeridos para lidiar con las necesidades críticas relacionadas con el virus", agregó.