El gobierno de Estados Unidos prestará al constructor de automóviles Ford 5.900 millones de dólares (4.215 millones de euros) para que invierta en mejorar el rendimiento de los combustibles, como parte de un programa de 8.000 millones de dólares (5.715 millones de euros).
Dentro del mismo plan de ayudas, Nissan recibirá de la primera potencia económica mundial 1.600 millones de dólares (1.143 millones de euros).