Una serie de tormentas eléctricas obligó a la NASA a posponer el suministro de combustible en el transbordador espacial Endeavour, pero los encargados de la misión mantenían esperanzas en que las condiciones meteorológicas mejoraran y les permitieran realizar el lanzamiento el miércoles por la madrugada.
Justo en el momento en que debió comenzarse a cargar el combustible, el jueves por la noche, los relámpagos resonaron en el sitio de lanzamiento, y comenzó a caer una llovizna.
Es el segundo intento de la NASA por lanzar el Endeavour con siete tripulantes a bordo, en una misión que realizará obras en la Estación Espacial Internacional. Si el Endeavour no puede despegar el miércoles, no se realizarán más intentos este mes, pues debe efectuarse un lanzamiento de una misión no tripulada a la luna.