El Congreso asestó el jueves uno de los golpes más severos del gobierno contra el hábito de fumar, con una votación del Senado que aprobó una medida para dar a los reguladores más poder para limitar la nicotina en los cigarrillos y reducir drásticamente los anuncios publicitarios.
Además, la medida prohibe los productos de tabaco con sabores con caramelo y otros que atraerían a menores.
Los activistas antitabaco dicen que los cambios pudieran reducir las 400.000 muertes anuales causadas por el hábito de fumar y los 100.000 millones de dólares en costos de atención a la salud vinculados al tabaco.