Vietnam reconoció hoy haber cometido algunos "errores" en materia de Derechos Humanos durante su comparecencia ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, aunque rechazó las acusaciones realizadas por algunos exiliados sobre el tratamiento de disidentes y minorías.
Dichos exiliados, respaldados por grupos de Derechos Humanos internacionales, enviaron un informa al consejo en el que acusaron al país asiático de limitar la libertad de prensa y el acceso a internet para silenciar las críticas.
El texto demandaba también la puesta en libertad de los prisioneros políticos mantenidos bajo las "vagas previsiones de seguridad nacional" de la ley vietnamita, y denunció la represión religiosa, el uso indiscriminado de la pena de muerte y las prácticas coercitivas de control de natalidad.
