La economía española se contrajo un 2,9% en tasa interanual en el primer trimestre del año y un 1,8% en tasa intertrimestral, debido, sobre todo, a la "pronunciada reducción" de la demanda nacional, según las últimas previsiones realizadas por el Banco de España y recogidas en su boletín económico correspondiente al mes de abril.
De confirmarse este dato, sería la mayor contracción de la economía española en un trimestre desde la década de los 70, cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) comenzó a realizar las estadísticas de contabilidad nacional.
De esta forma, el banco emisor asegura que la caída del PIB se intensificó en España durante los primeros meses del año en un entorno recesivo mundial caracterizado por el deterioro de la confianza de los agentes, el colapso del comercio internacional y la persistencia de las tensiones en los mercados financieros, aunque algo atenuadas.