Whirlpool ha anunciado que su beneficio neto en el primer trimestre cayó un 28%, hasta 68 millones de dólares, 91 centavos por acción, mientras que las ventas lo hicieron un 23%, hasta 3.600 millones de dólares.
La compañía ha explicado que las fluctuaciones en las divisas y las menores ventas fueron compensadas en parte por la redución de costes, la mejora de la productividad y algunos beneficios fiscales.
Además, el fabricante de electrodomésticos ha mantenido sus previsiones de beneficio de entre 3 y 4 dólares por acción. Los analistas consultados por FactSet esperaban unas pérdidas de 16 centavos por acción.