Los países asiáticos, todavía traumatizados por la crisis del SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo) de 2003, estaban el domingo en estado de alerta por los riesgos de gripe porcina que ha matado al menos a 20 personas en México.
En Japón, las autoridades reforzaron los controles en los aeropuertos a los pasajeros procedentes de México. Se instalaron cámaras térmicas para detectar una eventual fiebre de los pasajeros.
Igualmente, se distribuyen documentos de información y máscaras a los pasajeros con destino a México y Estados Unidos. Una línea teléfono de informaciones sobre la gripe porcina recibió 400 llamadas el sábado, indicó un responsable del ministerio de Salud.