El Ayuntamiento de L'Aquila, dirigido por el alcalde Massimo Cialente, pidió ayuda en un telegrama enviado, entre otros, al departamento de Protección Civil del Gobierno italiano cinco días antes de que se produjera el gran seísmo del pasado 6 de abril que se ha cobrado 295 vidas.
El telegrama, del que informa el diario italiano 'La Repubblica', daba cuenta de los continuos temblores de tierra registrados en la ciudad meses antes de la tragedia y del mal estado de algunos edificios, para lo que Cialente pedía la declaración del estado de emergencia.
"En relación a los graves y constantes episodios sísmicos cuyo inicio se remonta al 16 de enero pasado, bajo forma de cotidianos goteos de terremotos de unas doscientas sacudidas o más, culminados con un temblor de cuarto grado el 30 de marzo pasado, pediría una urgente aprobación de fondos para las primeras emergencias", reza el telegrama del 1 de abril.